La importancia del transporte conectado en la construcción de ciudades inteligentes
por Josh MacKinnon, Director de Sistemas de Ingeniería
La adopción de tecnologías digitales en el sector del transporte público está aumentando rápidamente en todo el mundo. Esto incluye la implementación de redes de comunicaciones de tránsito de alta capacidad que permitan vehículos conectados, estaciones inteligentes y operaciones de transporte basadas en datos. Estas redes facilitan aplicaciones inteligentes que mejoran la eficiencia, la asequibilidad y la seguridad del transporte público, tanto para los operadores como para los pasajeros. En la era pospandémica, las autoridades están deseosas de recuperar el número de usuarios, y el aprovechamiento eficaz de estas tecnologías puede ayudar a satisfacer la acuciante necesidad de mejorar los sistemas de transporte público.
El transporte conectado constituye una base esencial para las comunidades inteligentes. Los sistemas modernos de transporte público deben hacer algo más que transportar pasajeros. Deben contribuir a la sostenibilidad medioambiental de las ciudades reduciendo la dependencia del automóvil privado y satisfaciendo las expectativas de los pasajeros. En este contexto, el transporte conectado está dando forma al futuro de la movilidad.
Un informe reciente del Banco Mundial hace hincapié en la importancia de una experiencia de transporte público perfecta. Describe la disponibilidad de la conectividad de red 5G como una oportunidad revolucionaria para la movilidad urbana, que permite a las ciudades mejorar las operaciones públicas, introducir una planificación dinámica del transporte y generar mayores ingresos gracias a un mayor uso del transporte público.
Los residentes reconocen el valor de esta oportunidad. Según el Informe sobre las perspectivas de conectividadde Boldyn Network, más del 90 % de los pasajeros consideran que la cobertura móvil continua sobre y bajo tierra es una característica de una ciudad de clase mundial. Asimismo, el 93 % apoya la inversión gubernamental en redes inalámbricas y de fibra óptica para el transporte.
Desplegar la infraestructura adecuada para un transporte inteligente y conectado es el primer paso hacia la creación de un ecosistema de red integral que satisfaga las diversas necesidades de los viajeros. Al satisfacer estas necesidades, se puede maximizar el uso del transporte, lo que da como resultado ciudades más accesibles con menos congestión vehicular y mejores oportunidades económicas y sociales para los residentes.
El transporte conectado y la información en tiempo real ofrecen numerosos beneficios a los residentes, administradores urbanos y empresas en ciudades de todo el mundo. Los municipios que invierten en ciudades inteligentes están abordando de manera efectiva varios desafíos urbanos mediante la utilización de datos en tiempo real de sus redes de transporte.
Por ejemplo, el Ayuntamiento de la ciudad Sunderland, en el Reino Unido, está utilizando tecnología inteligente para hacer frente a los costes económicos de la congestión. Aprovechando los datos de su red urbana, pueden gestionar y predecir el flujo de tráfico, mejorar la calidad del aire y aumentar la seguridad vial. Ejemplos similares son la red digital del Distrito de Tránsito Rápido del Área de la Bahía de San Francisco, la red de banda ancha de seguridad pública de la Autoridad de Transporte Metropolitano de Nueva York y la red de conectividad móvil del Metro de Londres.
Cuando la información sobre el transporte público en tiempo real se combina con aplicaciones fáciles de usar, las posibilidades de mejorar los desplazamientos se amplían. La información precisa e instantánea sobre las horas de llegada de los vehículos, la congestión de las rutas y los retrasos permite a los pasajeros tomar decisiones informadas sobre sus desplazamientos, incluido el ajuste de las rutas en función de las horas de salida y llegada. Las aplicaciones de aparcamiento inteligentes pueden guiar a los conductores hasta las plazas disponibles y eliminar la pérdida de tiempo dando vueltas alrededor de las manzanas de la ciudad.
El transporte conectado desempeña un papel fundamental para satisfacer las expectativas de los pasajeros. La inversión en ciudades inteligentes tiene como objetivo hacer que la vida urbana sea más fácil, segura y agradable, y el transporte conectado es un componente clave para lograr este objetivo. Permite a los gestores urbanos centrarse en satisfacer las expectativas de los pasajeros empleando una tecnología digital que beneficia tanto a los viajeros como a los operadores de transporte.
Los pasajeros tienen ciertas expectativas que permanecen constantes: seguridad, limpieza, eficiencia y asequibilidad. Además, la necesidad de mantenerse conectado es cada vez más importante, sobre todo a la luz de la pandemia de COVID-19 y de la adopción generalizada del trabajo a distancia. La tecnología para abordar esta necesidad está fácilmente disponible, respaldada por la conectividad de la red 5G.
Ciudades como San Francisco, Londres, Toronto, Nueva York y Hong Kong ya están cosechando los beneficios (y más) del transporte conectado. Los usuarios del transporte público de estas ciudades ya pueden disfrutar o pronto disfrutarán de entretenimiento a bordo, pantallas de información, billetaje inteligente, servicios personalizados y mayor seguridad. Estas mejoras dan como resultado viajes más productivos y agradables para los viajeros, simplificando sus vidas.
La seguridad es una de las principales preocupaciones de los pasajeros, ya que aproximadamente el 74 % la considera su máxima prioridad para los sistemas de transporte público. Del mismo modo, el 68 % expresa su deseo de disponer de funciones de seguridad relacionadas con la conectividad, como sistemas inteligentes de control y vigilancia que ayuden a los operadores a gestionar los peligros, las intrusiones, los cruces ferroviarios y el comportamiento de los pasajeros. El análisis de vídeo de CCTV en tiempo real puede detectar y denunciar problemas como el hacinamiento, la entrada ilegal y el comportamiento anormal. Además, los sensores de audio pueden identificar y enviar alertas de sonidos inesperados, como cristales rotos o pasajeros en apuros.
La mejora de la seguridad operativa comienza con los vehículos conectados. La conectividad permite hacer un seguimiento del rendimiento del equipo e identificar con antelación posibles peligros para la seguridad, como puertas que se cierran con lentitud, frenos defectuosos o cojinetes de eje sobrecalentados. Las medidas de mantenimiento predictivo, los análisis de tendencias y las alertas en tiempo real ayudan a determinar cuándo se deben tomar medidas preventivas proactivas, lo que reduce los costos y minimiza el tiempo de inactividad.
Las expectativas de eficiencia pueden cumplirse mediante una gestión de las operaciones basada en datos. Al utilizar el Internet de las cosas (IoT) y la inteligencia artificial (IA), los escenarios operativos predictivos pueden optimizar la eficiencia. Estos escenarios proporcionan previsiones para los horarios del personal y de los trenes, la gestión de multitudes en las estaciones y la planificación del trazado de las estaciones. Para los pasajeros, las pantallas interactivas conectadas a fuentes de datos en tiempo real ofrecen puntos de ayuda de fácil acceso. Además, los sistemas de billetes inteligentes conectados a aplicaciones y las barreras biométricas para billetes facilitan el cálculo preciso y fluido de las tarifas a la entrada y a la salida.
En cuanto a la asequibilidad, el informe del Banco Mundial se muestra optimista ante la posibilidad de que la eficiencia operativa del transporte conectado atraiga más usuarios e ingresos, al tiempo que se reducen los costes de explotación. En consecuencia, esto podría conducir a tarifas reducidas y una mayor asequibilidad para los usuarios de bajos ingresos. La mejora de los sistemas de vigilancia y control de las tarjetas inteligentes y la capacidad de las agencias de transporte público para orientar mejor las subvenciones a los usuarios del transporte público se citan como posibles beneficios.
Las ciudades inteligentes con opciones de transporte conectadas e interconectadas crean experiencias de viaje locales más convenientes, eficientes, sostenibles y seguras. Cuando estas redes de transporte se combinan con comunidades y lugares conectados, se sientan firmemente las bases de una ciudad inteligente. Estas bases permiten crear redes dinámicas entre ciudades y espacios, fomentando comunidades comprometidas y prósperas.
En nuestro próximo blog de la serie "Construir las ciudades inteligentes del futuro", profundizaremos en los locales conectados y su papel en la construcción de comunidades inteligentes.