«Somos proveedores de tipo boutique que ofrecemos soluciones a medida a nuestros clientes».

«Atrevidos y dinámicos», promovemos un futuro inclusivo y sostenible para todos gracias a la conectividad. Nos definimos como una empresa challenger, dado que buscamos soluciones disruptivas para ofrecer una conectividad vanguardista, ayudando a nuestros clientes a afrontar sus desafíos en el proceso de transformación digital. Para ello, nos reunimos con ellos, atendemos sus necesidades y aportamos una propuesta adaptada con soluciones a medida. Somos proveedores de tipo boutique.

¿Y dónde lo hacemos? En cualquier tipo de entorno, pero sobre todo somos especialistas en infraestructuras críticas. Nos sentimos cómodos allí donde nadie quiere o puede llegar, como en minas, refinerías, bases militares…

¿Quiénes son vuestros competidores y qué os diferencia de ellos?

Nuestra competencia son los operadores móviles e integradores de sistemas locales o globales. Lo que nos diferencia de ellos es nuestra propuesta de valor: soluciones de conectividad innovadoras con foco en redes privadas 5G. Se trata de redes dedicadas que garantizan una conectividad fiable y segura y que están en exclusiva para una sola organización, lo que permite aportar privacidad de los datos. Son infraestructuras que permiten conectar cosas, personas, máquinas, activos… ayudando a las empresas a desarrollar casos de uso y fomentar esa digitalización. Y todo adaptado a lo que piden los clientes, con soluciones dedicadas ent to end.

"Nuestra propuesta de valor sonsoluciones de conectividad innovadoras con foco en redes privadas 5G que ofrecemos bajo un modelo as a service"

Nos sentamos con clientes para identificar su caso de negocio, sus necesidades. Luego hacemos un diseño de red privada a medida, la instalación en campo, la integración con sus redes, la puesta en servicio y después la mantenemos y operamos con nuestro centro de control y especialistas, ofreciendo SLA de muchos 9 detrás (estamos presentes en infraestructuras críticas que exigen esos niveles). Además, en ese acompañamiento buscamos nuevos casos de uso que puedan integrarse en esas redes para mejorar la sostenibilidad y el negocio.

Y eso lo combinamos con un modelo económico de redes como servicio. Nosotros hacemos la inversión y ofrecemos un servicio de red en base a cuotas mensuales o anuales. Hemos detectado que en el mercado español las empresas prefieren invertir en OPEX y son más reticentes al CAPEX. Esto se debe a la falta de presupuesto y a la preferencia por destinar sus inversiones a su core business. Además, también hemos visto una tendencia hacia la externalización de aquello que no forma parte de su núcleo de negocio y a la búsqueda de un proveedor que les dé ese servicio. Y esto es lo que proporcionamos desde Boldyn Networks.

A finales de agosto, Boldyn Networks anunció que España era un país clave en su negocio... ¿por qué es relevante nuestro país para su estrategia corporativa?

Vemos a España como a uno de los mercados con mayor potencial de Europa porque tanto empresas como Administración Pública están impulsando la adopción de redes privadas y 5G dentro de su estrategia para transformarse digitalmente. Por eso lo consideramos un país estratégico en la política de crecimiento y expansión de nuestro negocio.

En el comunicado también se anunciaba el proyecto en BASF en Tarragona. Cuénteme un poco más sobre esta iniciativa: fases, retos, beneficios para el cliente…

En BASF está la primera red privada 5G en producción de la industria química en España. Ya hemos hecho el despliegue para implementar conectividad en toda la planta (más de 100 hectáreas), dando cobertura y también para desarrollar nuevos casos de uso que permitan mejorar los procesos productivos de la compañía y también la seguridad de su personal.

En concreto, además de esa red privada, trabajamos en una aplicación de misión crítica que permita a la multinacional transitar desde los terminales tipo walkie-talkie que tienen a día de hoy a terminales smartphones que tengan esas funciones de los anteriores sistemas (como comunicaciones grupales y push to talk) y añadan más funcionalidades como el envío de vídeo, compartir vídeo llamadas en tiempo real, geoposicionamiento, etc.

En este proyecto empezamos como Cellnex hace unos 3 años. La compañía tenía una directriz a nivel de grupo para trabajar en digitalización y conectividad, pero no sabían cómo llevarla a cabo. Durante unos meses les explicamos cómo una conectividad privada les podía ayudar a implementar esas aplicaciones que querían realizar para mejorar la productividad, la seguridad…. Tras estas conversaciones acordaron un piloto de unos 12 meses y desarrollaron 4 casos de uso distintos: comunicaciones críticas; realidad aumentada para mantenimientos asistidos; sistema basado en IoT con sensores para recopilar datos de consumos energéticos y reducir su huella de carbono; y guiado de vehículos automáticos mediante cámaras. Cuando finalizó el piloto, hicieron un análisis de gestión y lanzaron un proceso de oferta y demanda en el que participamos y ganamos.

Así que empezamos a desplegar como Cellnex y ahora seguimos desarrollando el proyecto como Boldyn. Actualmente ya estamos en la fase final de implantación de la red, mediante su instalación en áreas muy próximas a zonas ATEX (explosivos). La idea es que antes de final de año empecemos a operar y mantener la red.

«A BASF le interesó mucho nuestra propuesta de red como servicio».

La red privada se forma por un core de red, que es el elemento principal de toda la red, el cerebro que gestiona los datos y el tráfico. Esta infraestructura la hemos instalado dentro de BASF, en sus instalaciones y centros de datos. Luego hay un sistema radio que está desplegado quirúrgicamente en toda la planta para ofrecer una cobertura de calidad (teniendo en cuenta todo el tema de solapamientos y buscando un throughput, una capacidad de red para abordar los casos de uso). En este punto estamos utilizando las frecuencias en autoprestación que cede el Gobierno a través de la SETELECO, concretamente la banda n40, que nos permite ser cien por cien autónomos en la prestación de servicios.

Así pues, nosotros diseñamos, implantamos, operamos y mantenemos la red. Desde nuestro centro de control llevamos el primer y segundo nivel, y tenemos esa interconexión de tercer nivel con el fabricante (Nokia) y hemos acordado con el cliente unos SLA estrictos por lo que somos responsables de asegurar que se cumple a lo largo del contrato con ellos que tenemos de prestación de servicio.

Pero no es el único proyecto en marcha, ¿verdad? ¿Qué otros tenéis en mente o desarrollaréis en un futuro próximo en nuestro país?

Algunos están en despliegue y por temas de confidencialidad no puedo mencionarlos. Aunque sí te puedo hablar de Forvia, líder en tecnología para el sector de automoción que trabaja para las principales marcas del sector a nivel mundial. En Tarazona (Aragón), hemos desplegado y estamos operando en sus instalaciones interiores una red privada 5G.

¿Cuál es vuestro perfil de clientes? ¿Hay algún sector en particular en el que queráis centraros?

A nivel de España tenemos cuatro segmentos donde ponemos el foco: energía, donde incluimos utilities (agua, gas y electricidad), refinerías y centrales nucleares; manufacturing con empresas químicas, del sector de la automoción y de logística; puertos y aeropuertos, un segmento clave y en el que actualmente estamos viendo una demanda muy alta de búsqueda de mejora de operaciones mediante una conectividad propia y dedicada que les permita autogestionarse sin depender de terceros, de los operadores; y transporte, fundamentalmente trenes y metros. En este último sector, y como Boldyn, tenemos muchos clientes en otros países con casos de éxito que queremos replicar en España. Es el caso del Metro de Nueva York o de Hong Kong y, sobre todo, el proyecto en Metro de Londres. Como empresa especialista en ofrecer conectividad, no sólo de redes privadas, sino de otras tecnologías como DAS, Small Cells, WiFi en entornos especiales, tenemos un contrato a 20 años con TFL (Transport for London) para ofrecer una columna vertebral de conectividad a lo largo de todos los túneles y sus más de 130 estaciones. Se trata de un proyecto enorme que tiene comprometida una inversión de 1 billón de libras y que va a provocar que la ciudad sea una de las mejor conectadas del mundo. Nosotros ofrecemos esa conectividad de red privada dedicada para poder gestionar los temas operativos del suburbano; también extensión de cobertura pública para lo que colaboramos con operadores para trasladar su señal dentro de todo el metro; instalación de sistemas WiFi en las estaciones y despliegue de pequeñas celdas en farolas, mobiliario público, fachadas… en las zonas más concurridas del exterior para hacer un refuerzo y ofrecer 5G también en la calle.

Además, también contemplamos tres segmentos emergentes: Salud, ya que tenemos hospitales muy importantes en España, pero con infraestructuras que no están a la altura del personal que trabaja en ellas, y vemos que a nivel público se está fomentando a través de diferentes fondos poder mejorar la conectividad en estos entornos; Agricultura, puesto que la conectividad en las zonas rurales no es buena porque los operadores no las están cubriendo y se está empezando a plantear hacer implementaciones privadas para mejorar dicha conectividad e introducir temas de IoT como sensores y otras aplicaciones; y Educación, sobre todo centralizada en campus universitarios donde ya contamos con proyectos interesantes en Estados Unidos que queremos importar también aquí. A principios de este año, adquirimos una empresa muy importante que se llama Apogee Telecom, especializada en implementar conectividad en campus universitarios y que cuenta en su haber con más de 300 despliegues. En este caso, desde Boldyn se ofrece fibra y Wi-Fi de última generación para profesores, investigadores, estudiantes y empresas que están asociadas al campus. Con toda esta experiencia, estamos viendo cómo importarlo a España para ofrecer un modelo parecido en nuestro país. Y en este sentido vemos oportunidades en proyectos europeos que están impulsando la conectividad 5G y la digitalización en este sector.

¿Cuántos sois en España? ¿Hay intenciones de que crezca la plantilla?

No podemos dar datos globales, pero sí te puedo decir que somos más de 1200 personas a nivel global. En la compañía hay intenciones de que crezca la plantilla y también la inversión. Como te he comentado antes, España es un país estratégico, nuestra política es crecer y expandirnos y España va a ser uno de los países de Europa donde queremos potenciarlo. De hecho, lo que vamos a hacer es duplicar inversiones en el próximo año, tanto a nivel de estructura como de infraestructura. En la línea de negocio de redes privadas que engloba toda Europa vamos a invertir 300 millones de euros.

Boldyn Networks es una empresa 100% privada y más del 85% de nuestras acciones son del fondo de pensiones de inversión canadiense CPPI, que opera a largo plazo y que está dedicando muchos esfuerzos a infraestructuras de telecomunicaciones, operadores neutros…

Como expertos en el despliegue de 5G privada, ¿cómo está la implantación de estas infraestructuras en el mundo y en nuestro país en particular? Parece que todavía vamos un poco lentos…

Hay que hacer una diferenciación entre lo que es la 5G pública, de las operadoras móviles, y la 5G privada. Respecto a la primera, puedo decirte que en las principales ciudades de España se están haciendo despliegues, aunque en el entorno rural hay tareas pendientes. Por diferentes circunstancias, otros países de Europa están más avanzados que nosotros.

«En España no estamos lejos de otros países punteros en 5G privada, como Alemania».

Ahora bien, en el caso del 5G privado, focalizado en nuestro tejido industrial, la situación es diferente. Aquí sí vemos que las Administraciones Públicas están viendo el potencial de esta conectividad para poder transformarse digitalmente y están haciendo una apuesta por ello. Estamos avanzando en esta dirección y no estamos tan lejos de otros países europeos punteros, como Alemania.

Hace tres años, cuando hablábamos con las empresas de este tipo de soluciones, era un tema totalmente desconocido y teníamos que hacer una labor pedagógica. Sin embargo, este último año son las propias empresas y las administraciones quienes proactivamente están viniendo a nosotros a preguntar e incluso pedir propuestas de implantación.

5G en el ámbito privado e industrial sí que estamos en el buen camino y en un momento bastante interesante en cuanto a demanda. Y, obviamente, seguirá creciendo. Las pioneras están siendo las empresas grandes, los grandes players, pero en los próximos años vamos a ver también como incluso las pymes tendrán necesidades para implantar este tipo de conectividad privada.

¿Puede suplir esta conectividad 5G con otra como WiFi, por ejemplo?

Creemos que ambas tecnologías van a coexistir, de hecho, ya están coexistiendo. Pero hay que saber diferenciar muy bien el caso de negocio y la necesidad de la empresa u organización. Aquí está la clave. Lo que hay que hacer muy bien es sentarse con el cliente, identificar esos requisitos que quiere y casos de uso, y según los que sean, será válida una tecnología u otra, o ambas.

La diferencia está en la criticidad de las comunicaciones. Si hablamos de entornos críticos que implica cuestiones que afectan a la producción, a la continuidad del negocio —el famoso 24/7—, a la automatización o a la seguridad de las personas… van a requerir unas comunicaciones seguras y fiables y para ello la tecnología 5G está preparada por diseño y por despliegue. Por diseño me refiero a que 5G se diseña en base a la normativa de la 3GPP, por lo que es una tecnología configurada para ser ya fiable y segura. Además, corre sobre bandas licenciadas y por lo tanto en el momento que tienes una franja dedicada no vas a poder ser interferido por terceros. Esto es vital, esto en la WiFi no pasa. WiFi es una banda totalmente abierta, puede ser interferida por cualquiera por lo que no recomendamos que nadie confíe, en un caso de uso crítico, bajo una red WiFi porque no puede asegurar que la comunicación vaya a ser fiable y segura. Así pues, los clientes tienen que ser muy conscientes de cuáles van a ser sus necesidades y qué casos de uso quieren desarrollar y según eso, decidir.

Además de esa seguridad, ¿qué beneficios aporta a las empresas la 5G privada?

5G aporta alta capacidad, alto throughput para responder a casos de uso que demandan este rendimiento (como cámaras 4K u 8K que necesitan una gran capacidad de transmisión de datos, soportar ese tráfico de bits); baja latencia (milisegundos); seguridad física (fiabilidad); y la privacidad de los datos porque al tener una red dedicada los datos van a quedar en casa, no van a salir fuera.

Y, por último, la implantación de IoT masivo que está dentro del propio diseño de la 5G, permitiendo conectar miles, e incluso millones, de dispositivos a la vez.

En España existe cierta polémica acerca de la asignación de espectro 5G de la que son beneficiarias solo unas cuantas operadoras y que ratifica, según Aotec, que las bandas medias y altas quedarán sin uso... ¿Qué opinas sobre estas demandas?

No es un tema que toque e implique directamente a Boldyn porque nos dedicamos a las bandas licenciadas que cede el Ministerio para poder utilizar en la industria en modalidad de autoprestación. En este sentido te puedo decir que España está apostando por estas bandas. Lo hemos visto desde hace tres años, cuando no teníamos disponibilidad de espectro y actualmente lo tenemos en dos bandas (n40 y n258, milimétricas). Con ello, el Ministerio quiere fomentar la digitalización de la industria en España para poder competir mejor en un entorno global.

Nuestro país está haciendo muy bien las cosas, tenemos que seguir ese recorrido y creo que todavía hay que seguir liberando más frecuencias, algo en lo que la SETELECO está trabajando. Incluso se trata de un tema que está liderando la Comisión Europea. Se han lanzado recientemente una serie de consulta para poder liberar más espectro a nivel europeo en la banda de 3,8- 4,2 Ghz en autoprestación.

«A corto plazo tendremos aún más espectro disponible para la industria».

En definitiva, se están haciendo muy bien las cosas y creemos que de cara al corto plazo tendremos aún más espectro disponible para la industria.

En cuanto a negocio, ¿cuáles son vuestros pronósticos para cerrar este año en nuestro país? ¿Auguráis un crecimiento?

Lo que te puedo comentar es a nivel de inversión y es que vamos a duplicar, con lo que te puedes hacer una idea del crecimiento que estamos proyectando. Nosotros ya tenemos una base sólida en España a raíz de la adquisición de la línea de negocio de Cellnex, pero lo que queremos hacer es potenciar el crecimiento de expansión en el país con parte de esa inversión que vamos a realizar. Esta es nuestra estrategia: hemos entrado en España para crecer y no hacerlo con los proyectos que ya tenemos -que también-, sino en el medio y largo plazo. Es una apuesta de Boldyn para estar aquí, establecerse, seguir siendo líderes y crecer más para ser todavía más líderes.

Finalmente, ¿qué perspectivas respecto a la industria telco veis de cara al futuro? ¿Despuntarán las redes 5G empresariales?

El entorno telco está sufriendo muchos cambios últimamente y eso es una oportunidad para los challengers como nosotros. De eso se trata, de aportar soluciones innovadoras para tener una propuesta de valor en el mercado.

En cuanto a tendencias, y muy relacionados con las redes privadas, estamos construyendo nuestro futuro en base a 4 pilares que son tendencias también en el mercado:

El primero es que los casos de uso impulsan la demanda. No hay red si no hay un caso de uso detrás. Y esto pasa tanto para las redes públicas (y lo vemos en la 5G, donde a lo mejor no ha salido esa killer aplication que haga que sea una necesidad básica), como en las privadas.

En segundo lugar, creemos que hay que ir más allá de la conectividad. Aún hay muchas empresas y organizaciones que carecen de ese conocimiento de las redes privadas, qué son y para qué sirven. Estamos en el proceso educativo, pero hay un mercado que no es consciente de lo que puede aportar. Lo que las empresas necesitan es un proveedor que entienda sus necesidades y pueda hacerle una propuesta adaptada. Desde Boldyn nos posicionamos en este sentido, no queremos ser un puro proveedor de tecnología, sino un socio tecnológico que acompaña a los clientes durante su proceso de digitalización, fomentando las redes, pero ayudándoles también en los casos de uso.

El modelo as a service (como servicio) es también otra tendencia. Cada vez más las empresas, sobre todo en España, prefieren el modelo opex (de gasto operativo) al capex (de inversión de capital), no quieren invertir, quieren dedicar sus inversiones a sus aplicaciones principales. Por eso seguimos apostando por ese modelo económico de pago por uso.

Y, por último, una tendencia que estamos viendo que empezó en Estados Unidos, pero que también se está incorporando en Europa y en España, es esa necesidad de multitecnología y multicapa. Los clientes quieren una solución global de conectividad, le da igual la tecnología que usen. Y para ello lo que hay que hacer es desplegar diferentes tecnologías: combinar una red privada con una solución DAS de cobertura pública, o con un WiFi… hacer esos mix que proporcionen una solución global.